Consejos para reducir el consumo de sodio
La mayoría de las personas en el mundo consumen demasiado sodio. Si ha tenido piedras de oxalato de calcio o de fosfato de calcio, debe reducir su consumo, incluso si toma medicinas para prevenir las piedras en los riñones.
Compruebe el porcentaje del valor diario (% VD) de sodio en la etiqueta de información nutricional que se encuentra en los alimentos que compra. Un bajo contenido de sodio es 5% o menos y un alto contenido de sodio es 20% o más.
Prepare comida casera partiendo de cero. Evite los alimentos procesados y las comidas rápidas; las sopas y verduras enlatadas; y los embutidos y fiambres.
Compre alimentos que tengan la etiqueta: libre de sodio («sodium free”), bajo en sodio (“low sodium”), menos sodio (“reduced sodium” o “less sodium”), ligero en sodio (light in sodium”), sin sal agregada (“no salt added”) o con poca sal (“lightly salted”).
Compruebe los ingredientes en las etiquetas de para ver si los alimentos contienen sodio escondido. Busque términos como: bicarbonato de sodio, polvo para hornear, fosfato disódico, glutamato monosódico, alginato de sodio, nitrato o nitrito sódico
Además de los alimentos: ¿las bebidas también influyen en la formación de cálculos?
Tome líquidos. Generalmente, tomar la cantidad suficiente de líquido todos los días es la mejor manera de ayudar a evitar que se formen la mayoría de los tipos de piedras en los riñones, ya que beber suficiente líquido mantiene la orina diluida y ayuda a eliminar los minerales que podrían formar las piedras.
Aunque el agua es la mejor opción, otros líquidos pueden ayudar, como las bebidas cítricas, también pueden ayudar a evitar las piedras en los riñones. Algunos estudios muestran que las bebidas como la limonada y el jugo de naranja, protegen contra las piedras en los riñones porque contienen citrato, lo que impide que los cristales se conviertan en piedras.
Como ya os dije, a menos que tenga insuficiencia renal, debe tomar de seis a ocho vasos de 8 onzas al día. Si anteriormente tuvo piedras de cistina, es posible que necesite tomar aún más. Hable con un profesional de la salud si no puede tomar la cantidad recomendada debido a otros problemas de salud, como incontinencia urinaria, frecuencia urinaria o insuficiencia renal.
La cantidad de líquido que necesita tomar también dependerá del clima y su nivel de actividad. Si usted vive, trabaja o hace ejercicio en climas cálidos, puede que necesite tomar más líquido para reemplazar el que pierde a través del sudor.
En cuanto a las aguas comerciales se recomienda consumir para favorecer la diuresis y eliminación de cálculos: (leer etiqueta nutricional)
Aguas hiposódicas (< 20 mg/l de sodio)
Aguas de mineralización débil o muy débil (hasta 500 y 50 mg/l respectivamente de residuo seco)
Aguas bicarbonatadas (> 600 mg/l bicarbonato) el tratamiento con esta agua se ve favorecido por la alcalinización de la orina. Pero, debido a la gran correlación que hay entre la concentración de bicarbonato-sodio y dado que la ingesta de sodio aumenta la excreción renal de calcio, a la larga puede suponer un problema para el paciente por lo que no debe tomarla por largos períodos de tiempo y tampoco si se sufre de hipertensión. Otra solución sería beber aguas con moderado contenido de bicarbonato y calcio y bajas en sodio.